No conocía esta bodega, pero he de decir que he quedado gratamente sorprendido, se trata de un buen vino en relación calidad-precio, apto tanto para amantes de los vinos de uva blanca como para bebedores ocasionales que quieran hacer un buen regalo.
Su denominación de origen es Somontano, una comarca aragonesa situada entre los Pirineos y el rio Ebro, un lugar perfecto para que el vino descanse en barrica.
El tipo de uva con el que está hecho es de la variedad Garnacha blanca, una variedad que crece sobre todo en el noreste de España, cuyos vinos se caracterizan por tener una baja acidez, con nótas cítricas y herbáceas.
En cuanto a la cata, no soy ningún profesional, pero si que me gusta el vino y he de decir que he quedado gratamente sorprendido con su sabor, tiene un aroma cítrico con toques de frutos secos y un pequeño regusto a melocotón o albaricoque.
No es un vino fuerte, es perfecto tanto para tomar antes de comer como para acompañar nuestra comida.
En boca es muy sabroso, con toques de miel y nos deja el sabor durante unos segundos, no se esfuma como otros vinos de menor calidad.
Se recomienda servir fresquito, máximo 8ºC, por lo que debemos tenerlo en la nevera unas horas antes de servirlo.
Sin duda es un buen vino con una calidad-precio aceptable, agradable en boca y por supuesto, un placer poder disfrutar de un buen vino nacional, recomendado 100%